Puede parecer increíble, pero es cierto. Podemos colocar a dos personas en una misma habitación totalmente pintada de blanco y sin ningún tipo de mueble, y mientras una notará que hay una minúscula mancha en la pared, la otra disfrutará de la claridad a su alrededor.
Yoga vital nos enseña que accionar es más importante que simplemente estar esperando a que algo pase. Esto se conoce popularmente como las dos caras de una misma moneda. Podemos imaginar que una cara es clara y la otra oscura, una positiva y la otra negativa, una radiante y la otra opaca. Podemos escoger entre tantas posibilidades como podamos imaginar, el detalle esta siempre en como la elegimos mirar. Si, un detalle tan sencillo como ese es el que define como percibimos la vida, y a consecuencia, lo que obtenemos de ella.
¿Estamos llenos de vida?
Observemos a los niños de manera naturalidad, la frase que más frecuentemente se escucha es “Están tan llenos de vida”. Y es que simplemente reflejan que están vivos, sus mentes aun no aceptan limitaciones y para ellos cualquier cosa es posible de solo desearlo.
¿Recordemos cuando también éramos así?, ¿Lo recordamos?, fijémonos que la pregunta dice “era”, en pasado. Si respondimos afirmativamente es señal de que nuestra calidad de vida probablemente podría beneficiarse de un cambio. De otra manera no necesitaría recordar porque lo estas viviendo. como nuestra objetivo de atajara, siento parte de la vida, no como simples espectadores. Podemos crecer físicamente, mentalmente y mantenernos eternamente felices como los niños, conectados con la vida.
Podríamos suponer que hay dos maneras de asumir la vida (así como las dos caras de la moneda), una es esperando que las cosas sucedan para entonces reaccionar ante ellas, mientras que la otra es creando lo que deseamos en nuestras vidas mediante nuestra voluntad consciente al emplear nuestro poder, siddhi.
Por lo general quien espera para reaccionar se siente “víctima de las circunstancias”, mientras que quien es proactivo, quien decide y crea su vida como la desea se siente poderoso, como los siddhis que se obtienen al practicar yoga vital.
Si, poderoso ¨siddhi, que es un poder muy especial, que contrario a otros tipos de poder hace a quien lo posee humilde, pues se da cuenta que es artífice de su propio destino, asume la responsabilidad de crear la vida que se merece, agradece y aprovecha la oportunidad de ayudar a cuantos se encuentren a su paso.
Parece algo grande, ¿Verdad?, y por supuesto que lo es, es la grandeza del SER INTERIOR, esa que todos llevamos dentro y es nuestra por derecho de nacimiento.
roma 2016
Yoga Vital una vía de realización.
Ekara Devi Natha Paola Alejandra Rios – 0358-4646501 – info@yogavital.com.ar